La lógica y los razonamientos
En las primeras clases expusimos que dada la
“amplitud” de las cuestiones que puede abordar la filosofía, se ha dividido en
ámbitos diferentes de estudio. Uno de ellos es la p Lógica.
¿Qué es la Lógica? La mayoría de los lógicos coinciden en afirmar que la Lógica tiene como objeto de estudio los razonamientos para determinar su corrección o incorrección.
Es un hecho que los seres humanos “razonamos” y a que a través de este proceso mental podemos resolver distintos problemas, extraer conclusiones, llegar a conocimientos nuevos, plantear hipótesis etc. Un razonamiento nos permite establecer conexiones causales y lógicas de los hechos que observamos o los conocimientos que ya poseemos para extraer así distintas conclusiones.
Podemos razonar a
partir de datos, que son como el
“material” para los procesos mentales que realizamos. En lógica estos datos se
llaman premisas que luego del proceso mental nos permiten llegar a una conclusión.
¿Cómo obtenemos los
datos de los razonamientos? Como estudiamos anteriormente los conocimientos los
obtenemos a través de la experiencia o a
través de la razón. La lógica utiliza estos datos expresados a través del
lenguaje en los llamados juicios.
Expliquemos un poco más en detalle.
Con el lenguaje las
personas podemos hacer muchas cosas: hablar,
preguntar, comunicarnos, etc. Otra
función importante del lenguaje es que es representativo,
nos permite “decir” cosas sobre el mundo, describirlo, hacer “juicios” sobre
él. , Puedo decir: “hoy hace un día magnífico”
o también puedo decir: “el césped está
mojado”. Pero también puedo hacer algo más. Puedo relacionar estos juicios: “Hoy
hace un día magnifico y el césped esta mojado”. Y al relacionar estos juicios puedo hacer un razonamiento y extraer nuevos conocimientos. Puedo entonces concluir: “por lo tanto alguien ha regado el césped”. Resulta
claro que esta conclusión (también llamada inferencia) se apoya y se fundamenta en las premisas.
Sinteticemos, la lógica
entonces se ocupa de como construimos nuestros
razonamientos, de los datos a partir de los cuales razonamos, de las relaciones
establecidas entre estos datos para llega r a conclusiones verdaderas, etc.
Indicadores de premisas y conclusión en un
razonamiento: ¿Cómo
detectamos en un razonamiento cuales son
los datos o premisas? ¿Cómo detectamos cuando estamos frente a una conclusión? Observemos que puede suceder
que no siempre los razonamientos aparezcan de manera ordenada, es decir primero
las premisas y luego las conclusiones. Para esto hay indicadores tanto para detectar
premisas como para detectar una conclusión.
Los indicadores de
premisas son: “ya que”…. “puesto que”….
“dado que”… “pues”, etc. Los indicadores de una conclusión son: “por lo tanto”… “por ende” …. “por
consiguiente”… “luego”…. “se sigue qué”, etc.
Tipos
de razonamientos lógicos: ªEl razonamiento deductivo: Este razonamiento fue descrito por primera vez por
filósofos de la Antigua Grecia, en especial Aristóteles. El razonamiento
deductivo consiste en pasar de
datos generales a una conclusión o
inferencia menos general o particular. Un ejemplo puede ser:
Premisa a):
“Todos los hombres son mortales”
Premisa b):
“Juan es hombre”
Conclusión:
por lo tanto…“Juan es mortal”
Otro ejemplo:
Premisa a): “Todos los insectos tiene tres pares de patas”
Premisa b): “Las hormigas son insectos”
Conclusión: por lo tanto…“Las hormigas tienen tres pares de patas”
Observemos bien la estructura del razonamiento deductivo. La conclusión “Juan es mortal” o “Las hormigas tienen tres pares de patas” ya se encuentra “implícita”
en los datos precedentes, solo se necesita “explicitarla”
en una conclusión. Por eso, una característica muy importante del
razonamiento deductivo es que si las premisas son “verdaderas” la conclusión
del razonamiento será siempre verdadera,
se sigue del razonamiento necesariamente su veracidad. Por lo tanto un
razonamiento deductivo ofrece mucha garantía
de estar en la verdad.
ªEl
razonamiento inductivo: En lógica, se designa como “inducción” a un tipo de
razonamiento que va de datos particulares
a un conocimiento de tipo más general; además es un tipo de razonamiento en
donde se obtienen conclusiones tan sólo
probables. Expliquemos esto con más
detalle partiendo de un ejemplo:
Premisa a): “El cuervo 1 es negro”
Premisa b): “El cuervo 2 es negro”
premisa c): “El cuervo 3 es negro”
Conclusión: por lo tanto…“Todos los cuervos son negros”
Como se observa, las premisas en un razonamiento inductivo son particulares (a diferencia de la deducción) y la conclusión es general (a diferencia de la deducción). Algo importante a tener en cuenta en la inducción es que esta conclusión ofrece “probabilidad” y no “seguridad” ¿Por qué? Porque es válida para esas observaciones particulares que se han realizado pero podrían observarse otras diferentes en el futuro que podrían contradecir el conocimiento al cual se ha llegado. Es decir podría observarse en el futuro un cuervo que no sea negro y sea de otro color.
Este carácter de probabilidad es lo que hace que las conclusiones
obtenidas por inducción sean “revisadas” permanentemente pues la realidad observada
puede modificarse y por lo tanto modificarse el conocimiento.
Aunque esto puede parecer una “debilidad” de la inducción, es un tipo razonamiento
útil no
solo para la vida cotidiana sino también para el conocimiento científico.
Otro ejemplo de razonamiento inductivo:
Premisa a): “El cisne 1 es blanco”
Premisa b): “El cisne 2 es blanco”
premisa c): “El cisne 3 es blanco”
Conclusión: por lo tanto…“Todos los cisnes son blancos”
Premisa b): “El cisne 2 es blanco”
premisa c): “El cisne 3 es blanco”
Conclusión: por lo tanto…“Todos los cisnes son blancos”
Este ejemplo es útil para entender el carácter de “probabilidad” de los
razonamientos inductivos pues su presunta veracidad quedo falseada cuando se
descubrieron cisnes negros.
Para ejercitarnos en los razonamientos:
Lee el siguiente fragmento adaptado
del libro de Arthur Conan Doyle: “la
reaparición de Sherlock Holmes”.
-Fíjese -mi querido Watson- que no resulta muy difícil
construir una serie de inferencias a partir del examen del surco que separa el
dedo índice y pulgar de su mano izquierda para concluir que usted no se propone
invertir su pequeño capital en valores de campos mineros.
–“No veo la relación” –dijo Watson-
-Es probable que no la vea pero existe –dijo Sherlock- Primero:
la noche pasada, cuando usted regresó del club, había entre el índice y el
pulgar restos de tiza. Segundo: usted se coloca tiza allí para afianzar el taco
cuando juega al billar. Tercero: usted solo juega al billar con el Sr.
Thurston. Cuarto: hace cuatro semanas me dijo que el Sr. Thurston tenía unos
valores mineros sudafricanos que expiraban en un mes y que deseaba que Ud.
entrara con él en ese negocio. Quinto:
Usted guarda sus cheques en mi mesa de despacho y no me ha pedido la llave.
Sexto: por consiguiente, no se propone invertir su dinero en ese negocio”.
-“¡Qué cosa más absurdamente sencilla! -dijo Watson-”
-¡Sencillísima! -dijo Sherlock molesto-una vez que se los explican a usted,
todos los problemas le resultan infantiles.
- indica cuales son las premisas y la conclusión de este razonamiento. -señala si se trata de un razonamiento inductivo o deductivo. Justifícalo.
- indica cuales son las premisas y la conclusión de este razonamiento. -señala si se trata de un razonamiento inductivo o deductivo. Justifícalo.
GOOD
ResponderEliminar